jueves, 1 de marzo de 2012

Un nuevo camino sin retorno


   Había una vez dos niños que se llamaban Pedro y Juan. Un día se fueron de excursión, pero se despistaron y se metieron por un camino sin retorno.

   Cuando se dieron cuenta intentaron volver, pero por alguna extraña razón no podían, cuando llegaban a cierto punto volvían al principio del camino, pero no se daban cuenta y seguían caminando. Un día Juan se dio cuenta, y propuso una idea, pasar al otro lado por una montaña, pero también volvían a empezar, así hasta que se murieron de hambre. Desde entonces cuentan que todo aquel que se mete por ese camino se muere de hambre o es devorado por los fantasmas de Pedro y Juan.

Raúl Ureña García. (5º curso).

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